jueves, 20 de noviembre de 2025

La etnografía como espejo de las tensiones: desafíos de género, masculinidades y política en los territorios del norte

Por Fernando Pequeño

Estuve compartiendo el 1° Encuentro de Etnografías en Territorios, un evento que desarrollaron en la Facultad de Humanidades de la Universidad Nacional de Salta (UNSa) entre el 18 y el 20 de noviembre de 2025. El objetivo fue la Producción de conocimientos y nuevos desafíos frente a problemáticas globales. La actividad, impulsada desde varias cátedras de Antropología en el contexto del ICSHO, buscó democratizar el conocimiento y emplear la etnografía en sus diversas acepciones para abordar problemas sociales y culturales contemporáneos en el norte argentino.

Mi interés particular al intervenir en este encuentro radicó en el desafío de compartir y promover la mirada de género desde la óptica de los estudios de las masculinidades. Observé la necesidad de tensionar los enfoques tradicionales, que legítimamente se centran en la experiencia femenina, para incorporar la perspectiva del varón, promoviendo con mis intervenciones la necesidad de que esta dimensión sea constitutiva de los abordajes etnográficos.

El costo de la fuerza: masculinidades y ruralidad

El panel Experiencias Etnográficas de los Estudios Rurales a la Perspectiva de Género fue el escenario donde esta discusión cobró vida. Mis preguntas a las expositoras, Valeria Alonso y Carolina, se enfocaron en dos dimensiones cruciales. Pregunté por la salud y el acceso al sistema, señalando que este capta muy poco a los varones, especialmente en relación con problemas como el uso de agroquímicos. Y pregunté sobre las relaciones de poder/emancipación: ¿cómo las mujeres rurales construyen e imaginan a sus varones en función de su propia autonomía y derechos, y cuáles son los costos de la masculinidad?.

Las expositoras presentaron una construcción del varón marcada por la hegemonía y la vulnerabilidad:

  • Valeria Alonso (Batán/Mar del Plata) documentó que los patrones de las quintas hortícolas no contratan familias a cargo de una mujer. Se presume que el varón debe tener la fuerza física para llevar adelante la quinta y asegurar la rentabilidad. Esta expectativa de fuerza es lo que obliga a las mujeres a soportar hechos de violencia de género o doméstica, pues perder al varón implica perder el trabajo y el hogar.
  • Carolina (Misiones/Tabaco) relató que el uso de venenos/agroquímicos es una actividad masculinizada. Los varones suelen negar el daño o se consideran "resistentes". Además, aunque la lechería sea una actividad "súper feminizada," el varón es el que ocupa las posiciones formales de representación (presidente de la cooperativa). Registramos que los hombres son víctimas de sufrimiento social que se "encarna en estados nerviosos" debido a la deuda con las empresas.

Problematizar las masculinidades para trascender la descripción de la opresión femenina

Mi interés en los "costos de la masculinidad" me parece que contribuye a complementar el análisis de las relaciones de género. Al indagar en la experiencia masculina, trascendemos la mera descripción de la opresión femenina para examinar cómo el sistema agroindustrial exige un tipo de varón (el fuerte, el que se arriesga) cuyo sufrimiento y límites corporales perpetúan la desigualdad de las mujeres, completando el círculo de la interacción de género.


Salud Mental y el Desafío de la IA en la Academia

En la mesa sobre Experiencia de Investigación Colaborativa Interdisciplinaria con las Cátedras de Antropología y Ciencias de la Educación, presentaron un estudio cuantitativo sobre adolescentes de Salta. El dato más revelador fue que la salud mental no es solo una variable, sino que emerge como un valor central en sus proyectos de vida.

Se percibe de modo diferencial por género y clase:

  • Para el género femenino, la salud mental es el valor más importante, incluso más que el dinero o el trabajo estable.
  • Los varones tienden a priorizar el dinero, el trabajo estable y la salud física.
  • Esta preocupación por la salud mental se intensifica a medida que sube el estrato socioeconómico.

El equipo de investigadores quiso demostrar que la producción de datos puede eliminar prejuicios. Al confrontar la idea de que la salud mental "no existe como problema" en las políticas públicas, la universidad genera información para el debate político, mostrando que este es un valor arraigado en las nuevas generaciones.

El panel concluyó con un intercambio vital sobre la Inteligencia Artificial (IA). Pregunté directamente: "¿Qué pasa con la gran IA? [...] ¿Cómo lo ven ustedes y cómo repercute en los métodos del la inteligencia artificial?". El director del equipo, el sociólogo Javier Judi, sostuvo que la "metodología en acto"—investigar para aprender a investigar—es la defensa. Argumentó que la IA puede ser una herramienta para la redacción, pero no puede reemplazar el análisis crudo del dato. La exigencia de que el estudiante interprete y analice las tablas, y la exposición oral como filtro, aseguran que la IA sea solo "una herramienta más del dato para construir datos".


Igualdad Ancestral y Defensa de la Diversidad Indígena

En el panel La Voz Indígena y la Lucha por el Territorio y la Memoria, las expositoras, líderes de radio en Tartagal, nos dieron una lección de inclusión. Al recuperar la dimensión de la Inclusión y Defensa de la Diversidad, mencionaron especialmente a Casandra, una comunicadora trans que fue rechazada por su familia. La comunidad de la radio le "abrió una puerta" y la acogió como "una familia más", saliendo a defenderla en la calle y dándole un espacio para su programa "Diversamente".

Posteriormente, al indagar sobre la Concepción Cultural de los Varones en los Pueblos Indígenas, una expositora ofreció una perspectiva histórica:

"Porque nuestra cultura eh siempre ha habido una igualdad. Siempre ha habido una igualdad en el trabajo, en los quehaceres de la casa, en la cocina, en lavandería, eh había una igualdad. El hombre lavaba, cocinaba, pero también la mujer hacía el rol del hombre".

Lamentablemente, esta práctica "se fue perdiendo". Mi pregunta permitió visibilizar que, detrás de la lucha por el territorio y la memoria, hay una batalla por recuperar esa igualdad perdida.

Me parece que la importancia de introducir la perspectiva de las masculinidades y la diversidad en la dimensión del género en las experiencias etnográficas es innegable. Las masculinidades, cuando son problematizadas, revelan los costos sistémicos que el sistema impone sobre los hombres para mantener la hegemonía. Por otro lado, la voz indígena permite hacer visible que la inclusión de la diversidad (como el caso de Casandra) y la igualdad de roles no son conceptos ajenos, sino saberes ancestrales que es urgente recuperar en la lucha por el territorio. La etnografía, al situarse en estas tensiones, se convierte en la herramienta indispensable para desmantelar prejuicios y construir un conocimiento verdaderamente integral.



miércoles, 19 de noviembre de 2025

Las Masculinidades modernas y el rol del Día Internacional del Hombre

 


Entrevista a Darío Ibarra
Por Darío Verón de www.fmnoticias881.com


En el contexto del día internacional del hombre, el periodista Darío Verón entrevistó al Dr. Darío Ibarra, psicólogo y experto en estudios de género, sobre el estado actual de las masculinidades. Postuló que el Día Internacional del Hombre, celebrado el 19 de noviembre, no debe ser visto como una conquista política análoga al Día de la Mujer, sino como una "fecha pedagógica" destinada a la autocrítica y la reflexión masculina sobre los efectos dañinos del sistema patriarcal en los propios hombres.

Los principales hallazgos en las investigaciones -expresó-, indican que la masculinidad tradicional impone severos costos a los varones, manifestados en una menor esperanza de vida (7 años menos que las mujeres), mayores tasas de suicidio, adicciones, accidentes y conductas de riesgo. Estos resultados se atribuyen a una "educación emocional deficitaria" que reprime la expresión de sentimientos y a la presión social por cumplir el rol de proveedor, lo que puede derivar en actividades delictivas.

Criticó al Estado por perpetuar la desigualdad de género a través de políticas públicas, como las licencias de paternidad desiguales, que refuerzan roles tradicionales y perjudican tanto a hombres como a mujeres. Aunque reconoció avances significativos, especialmente en el ejercicio de una paternidad más presente y afectiva, escribió el progreso general como un proceso de "tres pasos adelante y dos para atrás", con estancamiento en áreas como la violencia de género y la sexualidad. Finalmente, manifestó la necesidad del uso de medios de comunicación y el diálogo para visibilizar los temas que enfocan a los varones en su género, en lugar de manifestaciones públicas como una marcha de los hombres, que podrían ser malinterpretadas como una competencia con los movimientos feministas.

domingo, 2 de noviembre de 2025

A las compañeras del Área de Género en la UNJu: 30 años de coherencia militante y la incomodidad masculina como promesa urgente en el encuentro de Jujuy

A propósito del 30 aniversario del Área de Estudios de la Mujer y de Género de la UNJu, desde mi rol de compañero y militante de la memoria histórica en Salta, interpelo a los varones a asumir la "Epistemología de la Incomodidad" como legado político. Parto de la genealogía de Miguel Ragone, y propongo que esta postura se fundamente en las categorías de subalternidad, asedio e inmanencia enseñadas por el feminismo, para confrontar el poder masculino, el privilegio y la violencia estructural. Reclamo la renuncia al protagonismo y la acción cotidiana para estar a la altura de la revolución lograda por las feministas del Noroeste Argentino.

Ver también

sobre Sublimación, Subalternidad, el Asedio
y la inmanencia para desestabilizar el Patriarcado. 2025

Lily Louys, Fernando Pequeño, Sofía Brailovsky

Por Fernando Pequeño Ragone

A las compañeras del Área de Género en la UNJu

Estas palabras me surgen de la emoción y el respeto suscitados por la conmemoración de los 30 años de vida del Área Interdisciplinaria de Estudios de la Mujer y de Género de la Facultad de Humanidades y Ciencias Sociales de la Universidad Nacional de Jujuy (UNJu). Fue un encuentro que reafirmó la historia de lucha del feminismo pionero del Noroeste Argentino, en el que celebramos la coherencia política que logró transformar la academia, instalar el Protocolo de Violencia y alcanzar espacios de decisión (el "poder de firmar"). Ante este triunfo indiscutible, y desde mi lugar como compañero y militante de la memoria histórica en Salta, me dan ganas de compartirles una reflexión sobre el camino que aún nos falta recorrer a los varones: cómo honrar ese legado incorporando la Epistemología de la Incomodidad a nuestra práctica cotidiana.

Pasaron solo tes días del encuentro y puedo ahora que la emoción da paso a la reflexión, concatenar las ideas estalladas por la interpelación. Y quiero de nuevo abrazarlas recorriendo años y anécdotas junto a ustedes que parecían lejanas y mínimas, y que prendieron fueguitos internos en mi, al decir de Galeano. 30 (¡o 35!) años de fuego, coherencia y militancia.

La lucha de ustedes, que logró que el feminismo tenga el poder de "firmar" resoluciones y no solo de "pedir", que instaló un Protocolo y sentó a las compañeras en el Vicerrectorado, es la verdadera revolución de nuestro tiempo en el Noroeste. Mi respeto es infinito y mi deseo es acompañar la profundización de todo ese trabajo en la vida cotidiana.

Pero mi convicción, compañeras, no proviene solo del camino académico o de la gestión. Nace de un camino marcado por la memoria y la resistencia que me constituye. Mi apellido me interpela con una historia de militancia, justicia y dolor. Soy parte de una genealogía que honra a Miguel Ragone, aquel gobernador peronista que fuera víctima del terrorismo de Estado en 1976. Mi historia personal está intrínsecamente ligada a la Asociación Miguel Ragone por la Verdad, la Memoria y la Justicia, que lleva décadas de asedio al olvido.

Esta memoria militante es la que nutre mi mirada sobre las masculinidades. ¿Por qué? Porque tanto la lucha por la Verdad y la Memoria como la lucha feminista son combates frontales contra la violencia estructural, contra el poder hegemónico que aplasta la dignidad y contra la forma más violenta de la masculinidad: la que utiliza al Estado para desaparecer y oprimir. Quien aprendió a buscar a un desaparecido, sabe que la lucha nunca puede ser cómoda.

Mi deseo de acompañar lo fundo en la “Epistemología de la Incomodidad” como legado


Por este motivo que liga opresión y búsqueda, mi propuesta de la Epistemología de la Incomodidad no es solo una herramienta teórica para varones; es un legado político que nos exige estar a la altura de la historia. Si la Asociación que me honra ha confrontado el poder que mata, a nosotros nos toca confrontar el poder masculino que oprime, violenta y asesina en el ámbito doméstico e institucional.

Para que esta epistemología sea una promesa de compañía y no un gesto vacío, debe anclarse en las tres categorías que ustedes nos han enseñado con su hacer cotidiano: la subalternidad, el asedio y la inmanencia.

El varón hegemónico es el sujeto universal, el que no necesita explicar su existencia. La subalternidad es la exigencia de que el varón asuma el lugar del interpelado por la crítica feminista, no el del examinador. En este sentido, la subalternidad histórica se ejemplifica en la experiencia de la Asociación Miguel Ragone, que representa la subalternidad máxima: ser la voz de quien fue silenciado por el poder de un Estado Masculino y Militar. Aprender de esa lucha implica comprender que la verdad se construye desde abajo, desde la herida abierta. Esta incomodidad obliga al varón a renunciar al protagonismo y a la justificación; debe ser capaz de sentir el peso del privilegio y aceptar que su conocimiento sobre el mundo es parcial, ciego y, a menudo, cómplice.

El patriarcado, como el olvido, es una estructura que se nutre del tiempo y la comodidad. Para combatirlo, la deconstrucción debe ser un asedio político constante. La labor de la Asociación Miguel Ragone ejemplifica ese asedio constante y no negociable para recuperar la memoria y la verdad, un proceso que lleva décadas. Este mismo espíritu de persistencia, esta misma tozudez frente a la estructura, es la que debe adoptar el varón para desarmar el patriarcado. Además, el feminismo nos asedia con la pregunta ¿dónde están los varones? Nuestro trabajo es que esa pregunta nos obligue a la acción cotidiana. El asedio debe realizarse con cordialidad y humor —el humor que desarma el gesto solemne de la masculinidad—, pero siempre con la firmeza de la no-vuelta-atrás.

Finalmente, la preocupación es que la deconstrucción sea una teoría vacía. La transformación debe ser inmanente: una experiencia vivida en el cuerpo y en el contexto político. Miguel Ragone representó una masculinidad militante y popular, una forma de vida que confrontó el poder hasta las últimas consecuencias. La inmanencia para los varones de hoy es asumir que la lucha por la justicia de género no es un favor, sino el camino para recuperar nuestra propia dignidad y construir una vida política que valga la pena. La incomodidad se vive en el presente: en la sala de reuniones, en la universidad, en el hogar. Es asumir que si ustedes lograron transformar la UNJu institucionalmente, nuestro trabajo es aplicar esa crítica feminista inmanente para confrontar la violencia y el privilegio en nuestros propios espacios, rompiendo los "códigos alternativos" de complicidad y silencio.

Compañeras, mi deseo es que esta propuesta nos encuentre a todos, varones deconstruidos y aliados, trabajando con la humildad de quien sabe que la lucha es de ustedes pero el destino de la equidad es de todos. Que el legado de lucha de la memoria nos impulse.

¡Salud, persistencia y a seguir incomodando la vida con la alegría de la militancia! ✊🏽

martes, 21 de octubre de 2025

PRIHO: PROGRAMA DE INTERVENCIÓN PARA HOMBRES

 


Para bajar la guía.

https://mujeresydiversidad.salta.gob.ar/priho/

2025-10-21

Contenidos:

PRIHO: PROGRAMA DE INTERVENCIÓN PARA HOMBRES

Presentación del Programa en su página institucional

La presentación de la guía: Abordaje de masculinidades y prevención de la violencia de género.

Los interlocutores

Objetivos y marco estratégico de la guía

1. Origen y Propósito de la Guía

2. Filosofía y Enfoque Central

3. Contenido y Metodología

4. Implementación y Adaptabilidad

5. Objetivos Estratégicos y Llamado a la Acción

6. Acceso a la Guía Metodológica

Análisis del Programa PRIHO y su Metodología para Trabajar con Masculinidades

Resumen Ejecutivo

1. El Programa PRIHO y su Marco de Actuación

2. Metodología de Intervención: Un Enfoque No Punitivo

3. Debates Estratégicos y Desafíos Operativos

4. Hacia una Agenda Preventiva y de Articulación Institucional

5. Perspectivas Comunitarias y Experiencias Locales

La ronda de diálogos y debates

1. El Programa PRIHO y su Marco de Actuación

2. Metodología de Intervención: Un Enfoque No Punitivo

3. Debates Estratégicos y Desafíos Operativos

4. Hacia una Agenda Preventiva y de Articulación Institucional

5. Perspectivas Comunitarias y Experiencias Locales

Expresiones de los facilitadores en la ronda

Agustín (Facilitador y Analista Metodológico)

Gonzalo (Facilitador y Desarrollador de Contenidos)

José María

 

 Presentación del Programa en su página institucional

El Programa de Intervención para Hombres, tiene por objetivo fomentar relaciones interpersonales equitativas y el desarrollo de masculinidades saludables y cumple dos funciones principales:

1. Trabajar con varones mayores de edad que ejercieron o ejercen violencia contra sus parejas y que tienen ordenada una medida cautelar por los Juzgados de Violencia Familiar y de Género: El programa trabaja para transformar patrones de violencia y control en este grupo específico, promoviendo activamente la igualdad, el respeto y formas positivas de ser hombre.


2. Prevenir futuras situaciones de violencia a través de la formación: Mediante diversas herramientas y dinámicas, el programa capacita a los participantes para reflexionar sobre sus conductas, comprender las dinámicas de la violencia de género, desarrollar habilidades de comunicación no violenta, gestionar sus emociones de manera constructiva y construir relaciones basadas en el respeto y la igualdad.

A partir de un proceso riguroso y reflexivo, encaminado a analizar y comprender las construcciones sociales de las masculinidades en clave de derechos humanos y perspectiva de género, el equipo del PRIHO elaboró una herramienta metodológica y didáctica.

Esta guía, se orienta a ser un recurso técnico-científico de alto nivel, elaborado con criterios especializados para su aplicación en diversos ámbitos territoriales y comunitarios.

En el siguiente link podrán descargar una versión de la misma.

Guía talleres Priho Salta-


 

La presentación de la guía: Abordaje de masculinidades y prevención de la violencia de género.

(Gemini NotebookLM) [1]

El equipo de trabajo del programa PRIHO en la Secretaría de Género de Salta, desarrolló una guía de trabajo a partir de experiencia de algunos años. La presentaron el martes pasado en salones de la Usina Cultural en Salta capital frente a una treintena de interesados, principalmente mujeres de organizaciones sociales. A continuación, las notas estructuradas de las expresiones de la Sub Secretaria del área y de los especialistas del programa.

Interfaz de usuario gráfica, Sitio web

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Los interlocutores

Se encuentran el equipo de elaboración del programa PRIHO (Programa de Reeducación para Hombres que Ejercen Violencia) y la subsecretaria de Genero y diversidades de la Secretaría de las Mujeres, Género y Diversidad.

Un grupo de personas de pie

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1.       La sub secretaria Inés Bocanera

  • Es la persona que inicia y cierra la presentación.
  • Su rol principal es presentar la guía metodológica y dar un reconocimiento al equipo que la elaboró.
  • Destaca la importancia de la intervención con varones para prevenir y erradicar la violencia contra las mujeres y las personas del colectivo LGBT.
  • Menciona que el objetivo de su Secretaría es abordar a aquellas personas que sufren violencia e intervenir con los varones que la ejercen para que puedan reconocerla, responsabilizarla y transformarla en una conducta saludable, promoviendo así las masculinidades saludables.
  • Anima a la capacitación y sensibilización de distintos organismos del Estado y organizaciones sociales, y confirma que el manual está disponible en la página web de Mujeres de Diversidad de Santa (en la pestaña de herramientas y servicio).

2. El Equipo Elaborador del Programa PRIHO

Este equipo fue el encargado de elaborar la guía metodológica y es el producto de la sistematización de tres años de trabajo.

A. Agustín Pérez Macheta

  • Es miembro del equipo de elaboración de la guía metodológica.
  • Describe el proceso de creación de la guía como un desafío que tomó tres o cuatro años, incluyendo la realización de grupos y la sistematización, además de enfrentar la burocracia del Estado.
  • Explica que la guía es una herramienta que surge del trabajo y la experiencia de los "chicos" (los varones con los que trabajan).
  • Detalla el enfoque de los grupos: son grupos psicosocioeducativos y apelan a una política no punitiva.
  • Su trabajo incluye “mucha meditación” y construcción teórica y colectiva, repasando los distintos tipos de violencia (incluyendo la omisión) y analizando cómo los códigos masculinos establecidos contribuyen a la misoginia.

B. Gonzalo Jofré

  • Es miembro del equipo de elaboración de la guía metodológica.
  • Comenta que el manual está dividido técnicamente en ejes o vectores que buscan tematizar y abordar la violencia hacia las mujeres y el trabajo con las masculinidades en clave de derecho y violencia de género.
  • Destaca que la guía es una propuesta metodológica que debe ser territorializada para poder trabajarla con otros grupos, instituciones o grupalidades.
  • Él, al igual que la anfitriona, enfatiza que la guía es una herramienta viva y flexible que requiere adaptabilidad al territorio.

C. José María Guaimás

  • Es miembro del equipo de elaboración de la guía metodológica.
  • Su rol específico dentro del programa PRIHO es como abogado.
  • Aborda las relaciones que tienen con el Poder Judicial.
  • Explica que PRIHO se creó inicialmente para recibir derivaciones directas del Poder Judicial (con personas que no habían sido denunciadas), pero ha crecido hasta convertirse en una herramienta social.
  • Define la guía como una "objetivación del pensamiento profesional del equipo PRIHO".
  • Resalta que el vínculo de la masculinidad no ha tomado su protagonismo en la sociedad y nota la baja presencia de varones en este tipo de temáticas o presentaciones.
  • Subraya que los talleres buscan que el varón pueda tener un protagonismo en la sociedad para deconstruir la cultura machista y erradicar la violencia que se ha incorporado y naturalizado.

 

Objetivos y marco estratégico de la guía

Se sintetiza a continuación la presentación de la guía metodológica para el trabajo con varones, producto de la sistematización de tres años de labor del Programa PRIHO. La guía se concibe como una herramienta práctica y concreta, surgida de la experiencia directa del equipo con hombres denunciados por violencia. Su filosofía central es una política no punitiva, que busca transformar conductas violentas a través de la educación y la reflexión, en lugar de la penalización. El objetivo principal es que los hombres reconozcan, se responsabilicen y transformen sus comportamientos violentos en conductas saludables, fomentando así la creación de "masculinidades saludables". El manual es una "herramienta viva", diseñada para ser adaptable y territorializada según las necesidades de cada comunidad, institución o grupo. La iniciativa forma parte de una estrategia más amplia para prevenir y erradicar la violencia contra las mujeres y las personas del colectivo LGBTIQ+, complementando el abordaje de las víctimas con una intervención directa con quienes ejercen la violencia.

1. Origen y Propósito de la Guía

La guía metodológica es el resultado tangible de la sistematización de tres años de trabajo del Programa PRIHO, una iniciativa creada en el marco de la Subsecretaría de Políticas de Género del gobierno de la provincia de Salta. Su propósito es ofrecer una herramienta concreta y práctica a todos los organismos que trabajan con varones, especialmente aquellos que han sido denunciados por violencia y derivados por instancias judiciales.

  • Fundamento: La guía se basa en la experiencia directa del equipo del programa en la conducción de "grupos psicosocioeducativos" con hombres.
  • Argumento Central: Para prevenir y erradicar la violencia de género de manera efectiva, es "necesario y urgente" no solo abordar la situación de las víctimas, sino también realizar una "intervención con varones".
  • Doble Enfoque del Programa:
    1. Intervención Directa: Trabajo grupal con varones que ejercen violencia, cuyo método se sistematiza en esta guía.
    2. Prevención y Sensibilización: Realización de capacitaciones dirigidas a organismos del Estado y jóvenes para promover una reflexión sobre la diversidad de masculinidades y fomentar modelos saludables.

2. Filosofía y Enfoque Central

El programa y la guía se sustentan en un enfoque no punitivo y transformador, PRIHOrizando la educación y la reflexión sobre el castigo.

  • Política No Punitiva: Se rechaza la idea de que la solución sea "meter en cárcel a todos los machistas". En su lugar, se propone "trabajar, ver ahí ese lazo, esa conversación interna" para generar un cambio real.
  • Promoción de Masculinidades Saludables: El objetivo es deconstruir los mandatos de las "masculinidades tradicionales" y explorar una diversidad de masculinidades que sean saludables y no violentas.
  • Humanización como Respuesta: Frente a un contexto social de crecientes "discursos de odio", la propuesta se centra en "humanizar, emocionar" como la principal herramienta de transformación.
  • Perspectiva de Derechos: El trabajo con las masculinidades se enmarca "en clave de derecho y en clave de violencia de género".

3. Contenido y Metodología

La guía está estructurada como un manual práctico para facilitar la intervención grupal, con un contenido diseñado para la reflexión y la construcción colectiva.

  • Estructura del Manual: Se organiza en "ejes" o vectores temáticos. Cada encuentro grupal aborda una temática específica englobada en uno de estos ejes.
  • Métodos Aplicados:
    • Grupos Psicosocioeducativos: Es el formato central de trabajo.
    • Herramientas Complementarias: Se menciona el uso de la meditación y la construcción teórica y colectiva.
  • Temáticas Abordadas:
    • Tipos de Violencia: Se repasan las distintas manifestaciones de la violencia, incluyendo formas no físicas como la omisión, un concepto que muchos participantes desconocen.
    • Deconstrucción del "Código Masculino": Se analiza cómo se relacionan los hombres entre sí y con las mujeres, cuestionando los estereotipos arraigados.
    • Raíces de la Misoginia: Se exploran los orígenes de la misoginia, ejemplificando con frases como "le pega como una nena", que asocian lo femenino con la debilidad o inferioridad.

4. Implementación y Adaptabilidad

Un principio clave de la guía es su flexibilidad y la necesidad de adaptarla a contextos específicos.

  • Una "Herramienta Viva": Se enfatiza que el manual no es un protocolo rígido, sino una propuesta abierta que "se puede seguir construyendo". Es un punto de partida para que los profesionales aborden la temática.
  • Necesidad de Territorialización: Es "importantísima" la adaptabilidad de la guía a cada territorio. Antes de su implementación, se debe realizar un análisis de las personas que convocan, las instituciones que albergan la propuesta y las características de los participantes.
  • Evolución y Alcance del Programa:
    • Origen: El programa PRIHO fue creado inicialmente para recibir derivaciones directas del Poder Judicial.
    • Expansión: Con el tiempo, ha crecido hasta convertirse en una "herramienta social" de acceso abierto para cualquier persona interesada en la temática.

5. Objetivos Estratégicos y Llamado a la Acción

La presentación concluye con una clara definición de los objetivos del programa y una invitación a la acción colectiva.

Objetivo

Descripción

Transformación Individual

Que los varones que ejercen violencia puedan reconocerla, responsabilizarse y transformarla en una "conducta saludable".

Cambio Cultural

Que el varón pueda asumir un "protagonismo en la sociedad para deconstruir esa cultura machista" que ha sido naturalizada.

Visión Final

Trabajar por "una provincia libre de violencia".

  • Estrategia de Difusión: Se han realizado capacitaciones por municipio para replicar el dispositivo y dejar herramientas prácticas en organismos del poder ejecutivo y organizaciones sociales.
  • Llamado a la Acción: Se insta a los presentes y al público en general a descargar, divulgar y utilizar la guía. Se promueve la organización de talleres y encuentros para continuar el diálogo y la construcción colectiva.

6. Acceso a la Guía Metodológica

El manual está disponible para su descarga pública y gratuita a través de los siguientes medios:

  • Sitio Web: En la página de la "Secretaría de las Mujeres, Género y diversidad" de Santa (nombre inferido por el contexto).
    • Pestaña: "Herramientas y servicio".
    • Sección: "Frío".
  • Código QR: Se dispusieron códigos QR en el evento de presentación para el acceso directo al documento.

Vinculo de descarga: https://mujeresydiversidad.salta.gob.ar/priho/


 

Análisis del Programa PRIHO y su Metodología para Trabajar con Masculinidades

Resumen Ejecutivo

Este documento sintetiza los debates y conclusiones de una sesión de trabajo sobre el programa PRIHO, una iniciativa de política pública diseñada para intervenir con varones que han ejercido violencia de género. El programa, articulado entre el poder ejecutivo y el judicial, se basa en una metodología no punitiva que busca la "humanización" del varón a través de un proceso socio-psicoeducativo. La intervención se estructura en 24 encuentros a lo largo de seis meses, utilizando herramientas como la meditación, la pedagogía del juego y la pedagogía popular para desarmar los estereotipos de la masculinidad dominante.

El principal desafío operativo es que los participantes no son voluntarios; llegan derivados por la justicia tras una denuncia, presentando una fuerte resistencia inicial, enojo y una escasa conciencia de su responsabilidad. La metodología aborda esto mediante un proceso gradual que inicia con la contención emocional ("alojar") para luego introducir la incomodidad, la problematización de la violencia y la responsabilización.

El programa enfrenta severas limitaciones de recursos, con un equipo de solo tres personas para toda la provincia, lo que restringe su capacidad de expansión. La visión estratégica a futuro se enfoca en transitar de un modelo de intervención directa a uno de "capacitador de capacitadores", con el fin de instalar capacidades en los municipios y otros territorios. Asimismo, se subraya la necesidad de ampliar el trabajo hacia la prevención en ámbitos educativos y comunitarios, adaptando los enfoques a contextos específicos como el rural y el de las comunidades originarias.

1. El Programa PRIHO y su Marco de Actuación

1.1. Misión y Naturaleza del Programa

El PRIHO es un dispositivo del poder ejecutivo que opera en articulación con el poder judicial. Su objetivo es trabajar con varones para problematizar y desarmar el modelo de masculinidad dominante que conduce al ejercicio de la violencia. La iniciativa se concibe como una política pública concreta que debe ser sistematizada, compartida, evaluada y demandada por la comunidad.

La experiencia del programa ha sido compilada en un manual que funciona como una "sistematización de una experiencia posible" y una "herramienta bien viva que está para ser modificada". Este manual, desarrollado a partir del trabajo con grupos de varones policías, está disponible en formato digital y ofrece un conjunto de ejercicios y actividades para talleres, adaptables a diferentes contextos.

1.2. Población Objetivo y Criterios de Intervención

El programa no trabaja con voluntarios. El principal marco convocante es la derivación judicial, lo que significa que los participantes son obligados a asistir como parte de un proceso judicial iniciado por una denuncia de violencia de género.

Perfil de los Participantes:

  • Llegada al Programa: La mayoría llega con enojo, sintiéndose víctimas de la situación ("la loca vino, me denunció"), y no consideran su comportamiento como un problema. Presentan pocas herramientas subjetivas y pacíficas para gestionar conflictos.
  • Origen de la Derivación: Se interviene en el proceso judicial que se habilita a partir de la denuncia, no inmediatamente después de la misma. Esto implica que ya existe una investigación judicial en curso.
  • Criterios de Exclusión: El programa no trabaja con varones que hayan cometido crímenes graves como femicidios, homicidios o violaciones. El espectro de intervención se centra en delitos como abuso simple, acoso o amenazas.
  • Proceso de Admisión: Se realiza una "entrevista de tamizaje" para evaluar si el varón tiene la posibilidad de lograr un reposicionamiento subjetivo. Se considera muy difícil trabajar con perfiles que presentan rasgos psicopáticos o psicóticos.
  • Perfil Sociodemográfico: Una parte significativa de los participantes son varones policías, muchos provenientes de zonas rurales del interior, que trabajan entre 60 y 65 horas semanales y pertenecen a sectores populares y vulnerados. Para muchos, ingresar a la fuerza policial representó un ascenso social respecto a las condiciones de trabajo en el campo.

2. Metodología de Intervención: Un Enfoque No Punitivo

El enfoque del PRIHO se aleja de la lógica punitiva, partiendo de la premisa de que "no es con más violencia que se va a resolver la violencia, sino con amor, con humanización". Se considera que el proceso de socialización masculina tradicional es deshumanizante ("no llores, no seas nena, bancatela"), por lo que el objetivo es reconectar al varón con su humanidad.

2.1. Fases del Proceso Metodológico

El programa se estructura en una secuencia de 24 encuentros semanales, de tres horas de duración idealmente, que avanzan de menor a mayor intensidad.

Fase

Objetivo Principal

Acciones y Enfoque

Fase 1: Alojamiento y Contención

Hacer sentir cómodos a los participantes y conectarlos con sus emociones.

Se trabaja con el enojo inicial para descubrir emociones subyacentes como el miedo o la vergüenza. Se utilizan ejercicios de meditación y estiramiento. Se busca "desarmar la armadura del macho".

Fase 2: Problematización e Incomodidad

Cuestionar el modelo de masculinidad y sus vínculos.

Se abordan los distintos tipos de violencia, la relación con otros varones, los hijos y la pareja. Se empieza a generar incomodidad de forma controlada.

Fase 3: Responsabilización y Reposicionamiento

Lograr que el varón asuma su parte en el conflicto y desarrolle nuevas herramientas.

Se trabaja sobre la pregunta "¿cuál es tu parte y tu cuota de responsabilización?". Se busca que el participante pueda construir un futuro vínculo sin repetir los mismos patrones violentos.

2.2. Herramientas y Técnicas Clave

  • Meditación: Descrita como una "herramienta increíble", se utiliza en casi todos los encuentros para que los varones, socializados para "producir", aprendan a "estar" y a conectar consigo mismos y sus sensaciones.
  • Pedagogía del Juego: Se emplean dinámicas lúdicas para desarmar la rigidez y la competitividad, a pesar de la dificultad inicial de los varones para jugar.
  • Pedagogía Popular: Se recurre a metodologías participativas para construir conocimiento de manera colectiva.
  • Ejercicios Reflexivos: Se proponen actividades como escribirle una carta a su "yo de antes" o a su expareja para fomentar la introspección y la empatía.

3. Debates Estratégicos y Desafíos Operativos

3.1. Composición de los Grupos: ¿Varones solos o Mixtos?

Existe un consenso en la necesidad de iniciar el trabajo en grupos exclusivos para varones. Se argumenta que, por la socialización masculina y la "fratria masculina", los hombres se sienten incómodos discutiendo sus emociones frente a mujeres, adoptando una "fachada de caballero" que impide un trabajo profundo. La presencia femenina puede inhibir la expresión de la vulnerabilidad. Se reconoce que hablar de masculinidades con grupos de solo mujeres tiene una profundidad y un diálogo completamente distintos.

3.2. Resistencia y Limitaciones de Recursos

  • Resistencia y Abandono: La resistencia inicial es una constante. Algunos varones no soportan la confrontación y abandonan el proceso, amparándose en el carácter "voluntario" de su permanencia.
  • Limitaciones de Recursos: El equipo del PRIHO se compone de solo tres personas para toda la provincia de Salta. Esta limitación de personal y la falta de un edificio propio impiden ampliar el alcance del programa, tanto en términos geográficos como en la capacidad de atender a una población más diversa (por ejemplo, varones ya condenados).

3.3. La Estrategia de "Capacitador de Capacitadores"

Ante la imposibilidad de una cobertura provincial directa, se plantea como estrategia central convertirse en "capacitadores de capacitadores". El objetivo es transferir la metodología y brindar herramientas a equipos locales en los municipios (como La Merced, Orán o Tartagal) para que ellos puedan implementar las intervenciones en sus propios territorios. Esto busca generar capacidad instalada y garantizar la sostenibilidad y pertinencia cultural de las intervenciones.

4. Hacia una Agenda Preventiva y de Articulación Institucional

Existe un fuerte consenso sobre la necesidad de trascender la intervención reactiva para enfocarse en la prevención, especialmente en contextos educativos y comunitarios.

4.1. Trabajo en Escuelas y con Adolescentes

Las experiencias en escuelas secundarias han sido heterogéneas. Se han enfrentado a desafíos como la falta de involucramiento de los docentes (quienes a veces dejan a los talleristas solos con hasta 200 estudiantes) y la falta de preparación de los jóvenes. A partir de esto, se ha definido como estrategia clave realizar un diagnóstico previo construido conjuntamente con la institución educativa para que esta asuma un rol protagónico y movilice sus propios recursos simbólicos e institucionales. Se observa con preocupación que los adolescentes actuales pueden ser "más machistas que las personas grandes".

4.2. Articulación con Municipios y Contextos Específicos

  • Gobiernos Locales: Son considerados los principales ejecutores de la territorialidad de estas temáticas. Se ha iniciado un ciclo de capacitación para los municipios con el fin de fortalecer sus capacidades.
  • Contextos Rurales e Indígenas: Se reconoce que la intervención en la ruralidad y con comunidades originarias es totalmente distinta. La cosmovisión, la dinámica familiar y las formas de socialización requieren la construcción de enfoques específicos, un área en la que el programa admite tener experiencia limitada pero que identifica como una necesidad crucial.
  • La Paternidad como Puerta de Entrada: Se ha identificado que la paternidad activa es uno de los pocos temas que genera una apertura y sensibilidad en los varones. El Instituto de Masculinidad y Cambio Social ha desarrollado un manual específico para trabajar paternidades, lo que representa una oportunidad estratégica para la sensibilización.

4.3. Diálogo con el Sistema Judicial

Se percibe que el mecanismo judicial es "bastante violento también para con las personas violentas". Los hombres llegan a instancias judiciales con mucha desinformación sobre regímenes de comunicación, cuotas alimentarias, etc. Se plantea la necesidad de capacitar a jueces y operadores judiciales, quienes a menudo trabajan con prejuicios y tienen un conocimiento limitado sobre masculinidades, a pesar de las capacitaciones obligatorias existentes.

5. Perspectivas Comunitarias y Experiencias Locales

La sesión de trabajo incluyó testimonios de actores locales que enriquecieron la discusión con experiencias concretas:

  • La Merced: Desde el hogar de protección para mujeres rurales, se comenzó a trabajar con varones por la propia demanda del contexto. Una iniciativa exitosa fue la organización de un encuentro sobre "lactancia paterna", que convocó a una gran cantidad de hombres. El espacio les permitió expresar sus miedos y experiencias en torno a la crianza, revelando que el no sentirse parte del proceso era una barrera significativa.
  • Iruya de Cañas: Durante una capacitación sobre no violencia, se dispuso que todos los trabajadores municipales (mayoritariamente hombres) asistieran. Contrario a lo esperado, participaron activamente y, al finalizar, varios se acercaron a preguntar si el área intervenía en casos de violencia sufrida por hombres, lo que llevó a la identificación de ocho casos.
  • Comunidades Originarias: Se destacó que el trabajo en comunidades como la guaraní requiere un abordaje completamente diferente, partiendo de temas como la agricultura para luego introducir la temática de las masculinidades. Las mujeres de la comunidad a menudo dejan que los varones tengan sus propios espacios de diálogo, respetando las dinámicas culturales internas.

La ronda de diálogos y debates

Posterior a la presentación tradicional del Programa frente a la prensa, se armó una ronda de diálogo tipo taller con los tres especialistas del programa que duró unos sesenta minutos. A continuación, las notas de esos diálogos.

 

Este documento sintetiza los debates y conclusiones de una sesión de trabajo sobre el programa PRIHO, una iniciativa de política pública diseñada para intervenir con varones que han ejercido violencia de género. El programa, articulado entre el poder ejecutivo y el judicial, se basa en una metodología no punitiva que busca la "humanización" del varón a través de un proceso socio-psicoeducativo. La intervención se estructura en 24 encuentros a lo largo de seis meses, utilizando herramientas como la meditación, la pedagogía del juego y la pedagogía popular para desarmar los estereotipos de la masculinidad dominante.

El principal desafío operativo es que los participantes no son voluntarios; llegan derivados por la justicia tras una denuncia, presentando una fuerte resistencia inicial, enojo y una escasa conciencia de su responsabilidad. La metodología aborda esto mediante un proceso gradual que inicia con la contención emocional ("alojar") para luego introducir la incomodidad, la problematización de la violencia y la responsabilización.

El programa enfrenta severas limitaciones de recursos, con un equipo de solo tres personas para toda la provincia, lo que restringe su capacidad de expansión. La visión estratégica a futuro se enfoca en transitar de un modelo de intervención directa a uno de "capacitador de capacitadores", con el fin de instalar capacidades en los municipios y otros territorios. Asimismo, se subraya la necesidad de ampliar el trabajo hacia la prevención en ámbitos educativos y comunitarios, adaptando los enfoques a contextos específicos como el rural y el de las comunidades originarias.

1. El Programa PRIHO y su Marco de Actuación

1.1. Misión y Naturaleza del Programa

El PRIHO es un dispositivo del poder ejecutivo que opera en articulación con el poder judicial. Su objetivo es trabajar con varones para problematizar y desarmar el modelo de masculinidad dominante que conduce al ejercicio de la violencia. La iniciativa se concibe como una política pública concreta que debe ser sistematizada, compartida, evaluada y demandada por la comunidad.

La experiencia del programa ha sido compilada en un manual que funciona como una "sistematización de una experiencia posible" y una "herramienta bien viva que está para ser modificada". Este manual, desarrollado a partir del trabajo con grupos de varones policías, está disponible en formato digital y ofrece un conjunto de ejercicios y actividades para talleres, adaptables a diferentes contextos.

1.2. Población Objetivo y Criterios de Intervención

El programa no trabaja con voluntarios. El principal marco convocante es la derivación judicial, lo que significa que los participantes son obligados a asistir como parte de un proceso judicial iniciado por una denuncia de violencia de género.

Perfil de los Participantes:

  • Llegada al Programa: La mayoría llega con enojo, sintiéndose víctimas de la situación ("la loca vino, me denunció"), y no consideran su comportamiento como un problema. Presentan pocas herramientas subjetivas y pacíficas para gestionar conflictos.
  • Origen de la Derivación: Se interviene en el proceso judicial que se habilita a partir de la denuncia, no inmediatamente después de la misma. Esto implica que ya existe una investigación judicial en curso.
  • Criterios de Exclusión: El programa no trabaja con varones que hayan cometido crímenes graves como femicidios, homicidios o violaciones. El espectro de intervención se centra en delitos como abuso simple, acoso o amenazas.
  • Proceso de Admisión: Se realiza una "entrevista de tamizaje" para evaluar si el varón tiene la posibilidad de lograr un reposicionamiento subjetivo. Se considera muy difícil trabajar con perfiles que presentan rasgos psicopáticos o psicóticos.
  • Perfil Sociodemográfico: Una parte significativa de los participantes son varones policías, muchos provenientes de zonas rurales del interior, que trabajan entre 60 y 65 horas semanales y pertenecen a sectores populares y vulnerados. Para muchos, ingresar a la fuerza policial representó un ascenso social respecto a las condiciones de trabajo en el campo.

2. Metodología de Intervención: Un Enfoque No Punitivo

El enfoque del PRIHO se aleja de la lógica punitiva, partiendo de la premisa de que "no es con más violencia que se va a resolver la violencia, sino con amor, con humanización". Se considera que el proceso de socialización masculina tradicional es deshumanizante ("no llores, no seas nena, bancatela"), por lo que el objetivo es reconectar al varón con su humanidad.

2.1. Fases del Proceso Metodológico

El programa se estructura en una secuencia de 24 encuentros semanales, de tres horas de duración idealmente, que avanzan de menor a mayor intensidad.

Fase

Objetivo Principal

Acciones y Enfoque

Fase 1: Alojamiento y Contención

Hacer sentir cómodos a los participantes y conectarlos con sus emociones.

Se trabaja con el enojo inicial para descubrir emociones subyacentes como el miedo o la vergüenza. Se utilizan ejercicios de meditación y estiramiento. Se busca "desarmar la armadura del macho".

Fase 2: Problematización e Incomodidad

Cuestionar el modelo de masculinidad y sus vínculos.

Se abordan los distintos tipos de violencia, la relación con otros varones, los hijos y la pareja. Se empieza a generar incomodidad de forma controlada.

Fase 3: Responsabilización y Reposicionamiento

Lograr que el varón asuma su parte en el conflicto y desarrolle nuevas herramientas.

Se trabaja sobre la pregunta "¿cuál es tu parte y tu cuota de responsabilización?". Se busca que el participante pueda construir un futuro vínculo sin repetir los mismos patrones violentos.

2.2. Herramientas y Técnicas Clave

  • Meditación: Descrita como una "herramienta increíble", se utiliza en casi todos los encuentros para que los varones, socializados para "producir", aprendan a "estar" y a conectar consigo mismos y sus sensaciones.
  • Pedagogía del Juego: Se emplean dinámicas lúdicas para desarmar la rigidez y la competitividad, a pesar de la dificultad inicial de los varones para jugar.
  • Pedagogía Popular: Se recurre a metodologías participativas para construir conocimiento de manera colectiva.
  • Ejercicios Reflexivos: Se proponen actividades como escribirle una carta a su "yo de antes" o a su expareja para fomentar la introspección y la empatía.

3. Debates Estratégicos y Desafíos Operativos

3.1. Composición de los Grupos: ¿Varones solos o Mixtos?

Existe un consenso en la necesidad de iniciar el trabajo en grupos exclusivos para varones. Se argumenta que, por la socialización masculina y la "fratria masculina", los hombres se sienten incómodos discutiendo sus emociones frente a mujeres, adoptando una "fachada de caballero" que impide un trabajo profundo. La presencia femenina puede inhibir la expresión de la vulnerabilidad. Se reconoce que hablar de masculinidades con grupos de solo mujeres tiene una profundidad y un diálogo completamente distintos.

3.2. Resistencia y Limitaciones de Recursos

  • Resistencia y Abandono: La resistencia inicial es una constante. Algunos varones no soportan la confrontación y abandonan el proceso, amparándose en el carácter "voluntario" de su permanencia.
  • Limitaciones de Recursos: El equipo del PRIHO se compone de solo tres personas para toda la provincia de Salta. Esta limitación de personal y la falta de un edificio propio impiden ampliar el alcance del programa, tanto en términos geográficos como en la capacidad de atender a una población más diversa (por ejemplo, varones ya condenados).

3.3. La Estrategia de "Capacitador de Capacitadores"

Ante la imposibilidad de una cobertura provincial directa, se plantea como estrategia central convertirse en "capacitadores de capacitadores". El objetivo es transferir la metodología y brindar herramientas a equipos locales en los municipios (como La Merced, Orán o Tartagal) para que ellos puedan implementar las intervenciones en sus propios territorios. Esto busca generar capacidad instalada y garantizar la sostenibilidad y pertinencia cultural de las intervenciones.

4. Hacia una Agenda Preventiva y de Articulación Institucional

Existe un fuerte consenso sobre la necesidad de trascender la intervención reactiva para enfocarse en la prevención, especialmente en contextos educativos y comunitarios.

4.1. Trabajo en Escuelas y con Adolescentes

Las experiencias en escuelas secundarias han sido heterogéneas. Se han enfrentado a desafíos como la falta de involucramiento de los docentes (quienes a veces dejan a los talleristas solos con hasta 200 estudiantes) y la falta de preparación de los jóvenes. A partir de esto, se ha definido como estrategia clave realizar un diagnóstico previo construido conjuntamente con la institución educativa para que esta asuma un rol protagónico y movilice sus propios recursos simbólicos e institucionales. Se observa con preocupación que los adolescentes actuales pueden ser "más machistas que las personas grandes".

4.2. Articulación con Municipios y Contextos Específicos

  • Gobiernos Locales: Son considerados los principales ejecutores de la territorialidad de estas temáticas. Se ha iniciado un ciclo de capacitación para los municipios con el fin de fortalecer sus capacidades.
  • Contextos Rurales e Indígenas: Se reconoce que la intervención en la ruralidad y con comunidades originarias es totalmente distinta. La cosmovisión, la dinámica familiar y las formas de socialización requieren la construcción de enfoques específicos, un área en la que el programa admite tener experiencia limitada pero que identifica como una necesidad crucial.
  • La Paternidad como Puerta de Entrada: Se ha identificado que la paternidad activa es uno de los pocos temas que genera una apertura y sensibilidad en los varones. El Instituto de Masculinidad y Cambio Social ha desarrollado un manual específico para trabajar paternidades, lo que representa una oportunidad estratégica para la sensibilización.

4.3. Diálogo con el Sistema Judicial

Se percibe que el mecanismo judicial es "bastante violento también para con las personas violentas". Los hombres llegan a instancias judiciales con mucha desinformación sobre regímenes de comunicación, cuotas alimentarias, etc. Se plantea la necesidad de capacitar a jueces y operadores judiciales, quienes a menudo trabajan con prejuicios y tienen un conocimiento limitado sobre masculinidades, a pesar de las capacitaciones obligatorias existentes.

5. Perspectivas Comunitarias y Experiencias Locales

La sesión de trabajo incluyó testimonios de actores locales que enriquecieron la discusión con experiencias concretas:

  • La Merced: Desde el hogar de protección para mujeres rurales, se comenzó a trabajar con varones por la propia demanda del contexto. Una iniciativa exitosa fue la organización de un encuentro sobre "lactancia paterna", que convocó a una gran cantidad de hombres. El espacio les permitió expresar sus miedos y experiencias en torno a la crianza, revelando que el no sentirse parte del proceso era una barrera significativa.
  • Iruya de Cañas: Durante una capacitación sobre no violencia, se dispuso que todos los trabajadores municipales (mayoritariamente hombres) asistieran. Contrario a lo esperado, participaron activamente y, al finalizar, varios se acercaron a preguntar si el área intervenía en casos de violencia sufrida por hombres, lo que llevó a la identificación de ocho casos.
  • Comunidades Originarias: Se destacó que el trabajo en comunidades como la guaraní requiere un abordaje completamente diferente, partiendo de temas como la agricultura para luego introducir la temática de las masculinidades. Las mujeres de la comunidad a menudo dejan que los varones tengan sus propios espacios de diálogo, respetando las dinámicas culturales internas.

 

Expresiones de los facilitadores en la ronda

La implementación del programa (PRIO) y sus talleres fue discutida en detalle por varios facilitadores en la reunión. A continuación, se desarrollan las expresiones de los principales participantes en la explicación de la metodología y la experiencia, separadas por facilitador y presentadas de modo estructurado.

 

Agustín (Facilitador y Analista Metodológico)

Agustín se enfocó principalmente en el contexto metodológico, institucional y la naturaleza dinámica del manual del programa:

Sobre la Guía y la Metodología

  • Naturaleza Dinámica del Manual: El manual es una sistematización de una experiencia posible, lo cual lo convierte en una herramienta sumamente dinámica que está disponible para ser modificada.
  • Adaptabilidad de los Encuentros: El equipo modificó los encuentros, subió, bajó y cambió actividades, y a veces territorializó un poco más las consignas.
  • Origen en la Política Pública: El manual surge en el corazón de la política pública, con la convicción de que esta debe pensarse de manera sistemática, compartirse, evaluarse e ir generando una historización de las intervenciones.
  • Trascendencia Histórica: La experiencia es una política pública concreta que tiene una historicidad que incluso trasciende al equipo actual, ya que muchas personas formaron parte de su elaboración.
  • Intervención Judicial: El programa interviene en el proceso judicial que se habilita a partir de la denuncia, no meramente en la denuncia en sí. Es necesario entender que entre la denuncia y el momento de la intervención hay un proceso en el que el varón también ha ido construyendo elementos.
  • Composición de Grupos: Argumenta que hablar de masculinidades solo con mujeres no es lo mismo que hablar solo con varones. Las actividades alcanzan otra profundidad y tienen otro diálogo y carga, ya que el costo social de la masculinidad es diferente para los varones que la opresión de género para la mujer. La intervención debe tener una instancia de trabajo exclusiva con las masculinidades.

Sobre el Perfil de los Participantes

  • Vínculo con la Violencia Ejercida: El primer gran enunciado es que no niegan que están trabajando con varones que ejercieron violencia de género contra mujeres.
  • Contexto Judicial: Los varones llegan con mucha desinformación a las instancias judiciales y el mecanismo judicial es percibido como violento para con las personas violentas.
  • Falta de Registro Personal: Los varones suelen llegar sintiéndose "violentados y víctimas de esta loca que me denunció," con muy poco registro personal o familiar sobre sus responsabilidades en la situación.
  • Perfil Laboral y Social: La población que llega incluye a varones de las fuerzas de seguridad (policías) que trabajan entre 60 y 65 horas semanales y tienen bajos ingresos (aproximadamente 800.000 a 900.000 pesos). Estos hombres dejan de hacer extras si les quitan el arma por la denuncia. A menudo provienen de sectores populares y vulnerados, siendo la primera generación con trabajo registrado.

Enfoque de Prevención (Educación)

  • Articulación en Escuelas: Señala que han tenido experiencias en escuelas, aunque a veces con grupos muy grandes (casi 100 o 200 estudiantes) y en condiciones difíciles.
  • Construcción de Diagnóstico: Para mejorar la intervención en escuelas secundarias, sugieren reunirse primero con las instituciones para construir un diagnóstico. Esto busca que la escuela movilice recursos simbólicos e institucionales propios, evitando que la capacitación sea vista solo como una liberación de hora para los profesores.

 

Gonzalo (Facilitador y Desarrollador de Contenidos)

Gonzalo se centró en la lógica de intervención, las herramientas emocionales y los pasos concretos del proceso dentro de los talleres:

Lógica de Intervención y Objetivos

  • Enfoque No Punitivo: Trabajan con una lógica no punitiva.
  • Desarmar y Alojar: El proceso busca desarmar la masculinidad dominante (que lleva a la deshumanización: "no llores, no seas nena") y alojar a los varones.
  • Trabajo Emocional: Inicialmente, buscan contener al varón y explorar las emociones subyacentes al enojo, como el miedo, la vergüenza o el silencio.
  • Grupos Socio-Psicoeducativos: Los grupos buscan desarmar o, al menos, problematizar el estereotipo de ser varón.

Herramientas y Actividades Clave

  • Meditación: Es un pilar que se propone en casi todos los encuentros, siendo una herramienta que los varones casi no tienen, ya que se les enseña a producir.
  • Pedagogía del Juego (Lo Lúdico): Utilizan el juego, lo cual es difícil para los varones debido a la presión de trabajar y rendir.
  • Fases del Proceso:
    1. Alojamiento/Contención: Se hacen sentir cómodos, se trabaja la conexión con uno mismo y se realizan ejercicios de estiramiento (ya que los varones suelen ignorar su salud física hasta que están "destruidos").
    2. Incomodidad/Problematización: Luego se analizan los distintos tipos de violencia.
  • Responsabilización y Reposicionamiento: Trabajan la responsabilización, pidiéndole al varón que identifique qué parte de la situación es su cuota de responsabilidad (ej., cómo se dirigía a su pareja, cómo estaban repartidos los cuidados en casa). El objetivo es un reposicionamiento para evitar reproducir el mismo patrón en futuros vínculos.
  • Duración Ideal: Está pensado para 24 encuentros (6 meses de intervención), idealmente una vez por semana durante 3 horas. Aunque se puede hacer en menos tiempo, cuanto más profundo es, mejor.
  • Actividades Específicas: Incluyen ejercicios para trabajar el vínculo con otros varones y con los hijos, escribir una carta a su "yo de antes," o una carta a su expareja.

Perfil de Admisión (PRIO)

  • Exclusión de Crímenes Graves: No trabajan con varones que hayan cometido un crimen grave (homicidas, femicidas o violadores).
  • Espectro de Intervención: Trabajan con varones con denuncias por abuso simple, acoso o amenaza.
  • Entrevista de Tamizaje: Usan una entrevista para evaluar si el varón tiene posibilidad de reposicionamiento, excluyendo aquellos con rasgos psicopáticos o psicóticos.
  • Motivación para la Asistencia: Los varones solamente llegan cuando están denunciados, ya que generalmente no consideran su comportamiento un problema personal, sino que culpan a la mujer o al feminismo.
  • Puerta de Entrada: El varón está más sensible o propenso a abrirse cuando se trabaja el tema de la crianza y la paternidad activa.

 

 José María

Este facilitador, en diálogo constante con Agustín y Gonzalo, aportó el marco institucional y las limitaciones operativas:

Implementación y Contexto Institucional

  • Público Cautivo: Sugiere que para la implementación de talleres es útil ir a una escuela ya que tienen un público cautivo, quizás articulando con un profesor de educación física o formación ética.
  • Mecanismo Convocante Obligatorio: El PRIO es un dispositivo del Poder Ejecutivo que trabaja en articulación con el Poder Judicial. Los varones son obligados a asistir por derivación judicial debido a una conducta ilícita que generó daño a una mujer.
  • Estrategia ante la Negación: Se presenta el varón a la defensiva, enojado y sintiéndose víctima. La propuesta es romper esa "coraza" (armadura) para poder entrar y corregir la conducta.
  • Articulación Penal: Confirma haber recibido derivaciones de juzgados penales (juzgados de garantía), incluyendo varones con condenas de ejecución condicional y reglas de conducta.
  • Criterio de Admisión Penal: Aunque han recibido casos con condenas, necesitan analizar cada caso concreto mediante una entrevista de admisión para decidir si ingresa, ya que las carátulas a veces no reflejan la levedad del delito.
  • Limitación de Recursos: Actualmente, son solo tres personas realizando intervención con varones para toda la provincia de Salta.
  • Estrategia de Expansión: Dada la limitación de recursos, el objetivo es ser capacitador de capacitadores (como en la Merced u Orán) para que el programa pueda ampliarse a nivel territorial en los municipios.

Relación con las Víctimas

  • No Revictimización: El programa no entrevista a las mujeres víctimas del agresor, ya que esto sería un proceso de revictimización.
  • Seguimiento de la Víctima: El seguimiento de la víctima es responsabilidad del juzgado, que solicita informes permanentes a la policía. El equipo del PRIO accede al expediente judicial para tener conocimiento de la denuncia, informes psicológicos/socioambientales, y si hay reincidencia, esta se aborda con el varón en el taller.

Visión Preventiva

  • Adolescencia: Señala con preocupación que la mayoría de los adolescentes son más machistas que los adultos, lo cual genera un "miedo" sobre la dirección de la construcción masculina.
  • Necesidad de Prevención: Considera que se debería instaurar un PRIO dentro del sistema educativo (proyectándolo hacia el futuro) y realizar actividades preventivas en dispositivos como clubes deportivos, universidades o salud, para no esperar a que ocurra una denuncia penal para intervenir.

 



[1] Desarrollado a partir de la grabación de las presentaciones.

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